HOTELES PARA PERDERSE: Dormir en un faro

Los faros han sido desde la antigüedad un referente para los navegantes que se han dejado guiar por su luz en las noches de tormenta y arduo temporal. Estas construcciones constituyen un elemento de referencia de los paisajes costeros y gracias a sus emplazamientos privilegiados se han convertido en el objeto de deseo de los viajeros más aventureros que buscan rememorar aventuras y leyendas. En la actualidad al automatizarse la iluminación ya no son necesarios los fareros, e incluso algunos de ellos se encuentran si uso o abandonados, por lo que muchos de ellos han sido destinados a otros usos como museos, miradores y pequeños alojamientos con encanto.

Contemplar el atardecer desde estos vigías del mar o dormir mientras se escucha el murmullo del mar ahora es posible puesto que algunos de ellos se han convertido en pequeños hoteles con encanto. Dormir en un faro es una experiencia única y memorable, que nos permite alojarnos en una estancia del pasado, pero con todas las comodidades del siglo XXI. Despertar, después de haber pasado la noche en uno de ellos, es una experiencia inolvidable que, además es posible vivir. Existen múltiples alojamientos de este tipo en diferentes puntos de la geografía europea como Escoria, Noruega, Bretaña, Croacia y el Mar del Norte, así como varios proyectos en marcha para rehabilitar faros en desuso como alojamientos. En España, te recomendamos:

Faro de Isla Pancha: Ribadeo (Lugo). Estuvo activo hasta el año 1983 y fue abierto como alojamiento en 2015. Dispone de 2 apartamentos para cuatro personas cada uno con un jardín privado. (www.faroislapancha.es)

O Semáforo de Fisterra: Finisterre (A Coruña). Hotel boutique con 5 habitaciones y restaurante. (www.hotelsemaforodefinisterra.com)

Hotel Semáforo de Bares: Santa María de Bares (A Coruña). Fue abierto como alojamiento en 2002. Hotel con 5 habitaciones y restaurante. (www.hotelsemaforodebares.com)

Faro de Punta Cumplida: Isla de La Palma (Canarias). En uno de los faros más antiguos de España (152 años de antigüedad). Hotel boutique con 3 suites y piscina infinita. (www.rusticae.es)